EL VICARIO FANTASMA DEL MUELLE DE RATCLIFFE
¿Es posible que el poder de la sugestión sea la causa que nos haga ver fantasmas donde no los hay?. En este extracto estraído del libro ¿Esto es paranormal? Por qué creemos en lo imposible. Richard Wiseman. Pag 189 Ed. RBA libros, por cierto un libro que es imprescindible de leer si uno quiere conocer los mecanismos que hay detrás de las creencias en los fenómenos paranormales y los mecanismos cerebrales que explican muchos de esos fenómenos. En este extracto el autor nos explica el caso de Fantasma del Muelle de Ratcliffe. Un fantasma inventado al que veían algunas personas del lugar.
¿Tan potente es el poder de la sugestión? ¿Podría ser que que la generación, estructuración y creencia de una idea inventada, se convirtiera en una realidad?...
En 1970, Frank Smyth era redactor asociado de una revista que trataba sobre fenómenos paranormales titulada Man, Myth and Magic (Hombre, mito y magia). Una mañana de domingo Smyth se desplazó al muelle de Ratcliffe del puerto de Londres para encontrase con su amigo John Philby (hijo del espía Kim Philby). Durante todo el siglo XIX el muelle de Ratcliffe había estado bastante concurrido. Debido al constante ir y venir de los pescadores, también se convirtió en un lugar de perdición, repleto de garitos de juego, bares de borrachos y burdeles. Philby estaba restaurando un viejo almacén de la zona y sugirió a Smyth que sería divertido inventarse una historia de fantasmas.
Tras un par de horas de productiva lluvia de ideas en un bar de las inmediaciones Smith y Philby crearon la historia del vicario fantasma del muelle de Ratcliffe. un emotivo relato sobre sexo, marineros y asesinatos. De modo que , si usted está cómodamente sentado, empezaré a contársela;
A principio del siglo XIX un antiguo vicario de la mayor iglesia elles denominada Santa Ana, montó una pensión para marineros en aquella zona. Sin embargo, cuando el negocio no dio tan buen resultado como esperaba, el más corrupto de los clérigos adoptó formas más repugnantes de llegar a fin de mes. El ex vicario pagaba jóvenes atractivas para que tentaran a antiguos huéspedes, los trajeran de vuelta a la pensión, les ofrecieran bebida hasta emborracharlos y los invitaran a las habitaciones para «echarse un polvo». Cuando los hombres se denudaban y se acostaban en la cama, el vicario salía de su escondrijo, los apaleaba hasta la muerte con su bastón con empuñadura de plata, les robaba todo el dinero y dejaba caer cadáveres en el turbio río Támesis. Según la tradición local, el espectro del antiguo vicario sigue apareciendo por la zona.
Tras comprobar detenidamente que aquella zona no se asociaba a actividades fantasmales, Frank describió su historia (completamente ficticia) en el último número de Man, Myth and Magic, señalando que tanto él como Philby habían visto realmente al fantasma.
Al cabo de tres años, un documental de la BBC describió el bulo; presentó una versión adaptada a la televisión de la historia del vicario fantasma del muelle de Ratcliffe (que incluía la señal «Alojamiento para Marineros» en el exterior de la pensión, donde el ex vicario utilizaba a mujeres atractivas para atraer a sus futuras víctimas) y fue en busca de gente que hubiera visto al inexistente fantasma. No tuvieron que ir muy lejos. Una mujer que vivía en los muelles informó que había visto al fantasma del vicario y describió que vestía camisa blanca y capa y llevaba el pelo, de color gris, largo y suelto. Convencida de que el espíritu del clérigo era un personaje bastante lascivo, mujer describió que a menudo tenía la sensación de que la observaba mientras se desnudaba por la noche. A continuación, un posadero de la zona describió que su hija y su nieto de dos años habían tenido un escalofriante encuentro con el espectro cuando habían empezado a vivir en su casa. Tras varias noches sin dormir, el pequeño señaló hacia un lugar de la habitación y dijo chillando que no le gustaba nada el hombre que estaba allí parado. La madre del niño se dio la vuelta y vio que el vicario fantasma la estaba observando. Entre los testigos, también había un obrero que vio al vicario dar la vuelta a la esquina para luego esfumarse ante sus ojos y dos policías que decían la mentira, toda la mentira y nada más que la mentira sobre la actividad del fantasma en el muelle.
El vicario fantasma del muelle de Ratcliffe es una clarísima ratificación de la teoría Houran. Los encantamientos no requieren fantasmas de verdad, paredes que funciona como cintas magnetofónicas, corrientes subterráneas, ondas sonoras de baja frecuencia ni débiles campos magnéticos. En cambio, lo único que necesitan es el poder de la sugestión.